Y le regalé una corbata,
para que esté cerca de su pecho
y pueda escuchar los latidos de su corazón
porque yo no puedo.
Para que la anude a su cuello
allá donde comienza a descender
hacia su glorioso y sexy cuerpo.
Para que deslice sus manos lentamente
a través de ella cuando se sienta triste
y recuerde que siempre
estoy a su lado
aunque no esté cerca.
Negra como su color favorito
Negra como la noche
Negra cono la oscuridad.
Negra porque la luz y el brillo
él se la da sólo con su alma
porque para mí
ninguna brilla más que la suya.
Yvania Romano
Coleccionista de letras